Dicen que las relaciones son difíciles y no creo que sea así. Lo que si puede ocurrir es que no estemos con la persona adecuada.  O bien, que demos por hecho creencias que no nos están sirviendo (de nuestros padres por ejemplo) y no hayamos aprendido a mantener una relación de pareja.

Cuando no existe un objetivo claro en el amor, puede que esta falta de claridad nos lleve a tener relaciones con las que no compartimos una visión de vida y de futuro.

Lo cierto es que,  pensar que existe esa persona con la que todo será un camino de rosas es un concepto un tanto inmaduro, ya que cuando estamos en una relación, esta actúa como un espejo que nos muestra todos los rincones sin explorar de nuestro inconsciente.

Pero, a decir verdad, sí que podemos comprobar si la persona con la que nos encontramos es la adecuada y si con ella, podremos compartir una vida en pareja.

Si preguntamos a parejas que llevan mucho tiempo juntas y que viven enamoradas, hacen las cosas juntas y parecen felices, con sus dificultades, evidentemente, responden que simplemente han trabajado en ello.

 

“El amor verdadero no sucede de inmediato; es un proceso en constante crecimiento. Se desarrolla después de haber pasado por muchos altibajos, cuando han sufrido juntos, llorado juntos, reído juntos”. Ricardo Montalbán

 

 

 

Dicen que con el amor no basta, aunque no creo que sea así. Lo cierto es que  el amor es la energía más poderosa. El amor todo lo crea y si es real, todo lo refuerza. El amor es el comienzo y el final de todo.

Lo cierto es que no hay que confundir el amor con el enamoramiento. Quizás el enamoramiento puede ayudar a comenzar un camino juntos, pero no será lo que te ayude a permanecer y crear.

En cualquier caso, las parejas que permanecen juntas no están exentas de trabajar sobre sí mismas, como individuos y como pareja.

Amar tiene mucho de compromiso, autoconciencia y empoderamiento sobre sí mismo. Amar requiere de una gran valentía, de determinación, de honorabilidad y de generosidad.

Es un trabajo digno de personas extraordinarias.

Aun así, es importante discernir si la persona con la que te comprometes es la adecuada. Para ello, te voy a facilitar cinco señales que te harán más facil la labor. Estas cinco señales son el trabajo llevado a cabo por Lee Phillips, Psicóloga y Terapeuta sexual.

 

1.      Tenéis una gran conexión tanto física como emocional

Si es amor verdadero, no sólo tiene que existir una conexión a nivel físico, sino también emocional. Cuando hablamos de conexión emocional, quiere decir que sois capaces de mostraros vulnerables, de compartir las sombras y los miedos más profundos, sintiendo la seguridad y el respeto del uno hacia el otro. No tenéis que compartir el mismo cuerpo del dolor, pero sí, ser capaz de empatizar y comprender.

Para que exista una conexión profunda, debemos de reconocer al niño interior. Son los niños los que realmente se comunican entre sí.

 

 

2.      Te sientes como en casa

Cuando se da la conexión emocional,  eres capaz de abrazarte con tu pareja y sentir que estás en casa; te sientes seguro y comprendido; existe intimidad y puedes mostrarte tal y cómo eres sin sentir que eres juzgado… Si es así, sin duda, estás con la pareja correcta.

 

 

3.      Compartís valores

Cuando las relaciones son sólidas en el tiempo es porque comparten valores. Estamos en un momento en el que no se contempla el valor de tener unos principios compartidos, una forma de ver y valorar el mundo. Una relación es un equipo y, para ello, debe de tener las armas necesarias para reforzar la relación de pareja.

 

 

4.      Amáis vuestras supuestas imperfecciones

La imperfección es un reflejo de la falta de confianza en uno mismo y en el otro. Estamos demasiado pendientes en aquello que creemos que falla o que falta. Si sientes que no eres aceptado, si estas continuamente demostrando tu valía, si continuamente te juzgan, si te hace sentir de menos o pequeño, no es la persona adecuada. Estás en una relación basada en la competencia, en un concepto de persona especial y esto conlleva mucha exigencia.

En una relación saludable, existe el apoyo, la necesidad de que la pareja se sienta realizada. El apoyo constante y la incondicionalidad. Santificar de algún modo la relación es elevarla.

Pregúntate, ¿estoy viendo la relación tal y como lo vería el amor?

 

 

5.      Sabéis poner límites saludables y respetarlos

En una relación saludable, hay un espacio creado entre los dos llamado pareja. También existe un espacio que es sólo tuyo y otro espacio que pertenece a tu pareja. Cuidar de estos espacios y respetarlos, forma parte también del trabajo  de la relación.

Entender que necesitas cuidar tu espacio, cuidar de tus relaciones, aficiones, tus sueños y necesidades individuales. Lo mismo necesita tu pareja.

Una relación necesita crear pactos y límites saludables. En esto consiste la comunicación y la madurez en la pareja.

 

Un proyecto de relación no es algo que llevemos innato y de manera natural. Es algo que hay que crear y construir, se deben desaprender conceptos heredados y aprender de nuevo.

 

 

CONCLUSIÓN

Va siendo hora de que entendamos que una relación de pareja se construye y todo punto de partida es uno mismo.

Asumir una relación es una formación personal, un trabajo de honestidad y de confianza en ti mismo.

Si estás cansado o cansada de ir acumulando relaciones, de sentir que todas han sido un fracaso pero aún crees en el amor, es  hora de transformar el modo en el que contemplas la pareja.

Nosotros estamos ayudando a personas que, como tú, quieren transformar sus vidas y sus relaciones a través de la Psico Conciencia Transformacional.

Si te interesa llegar a un nivel más elevado de conciencia y trabajar en tus cualidades y fortalezas, si lo que deseas es tener una mejor relación con quién es, ante todo, tu gran amor en la vida, tú mismo, te animamos a que te informes del próximo curso de Conecta con el amor a través del Mindfulness.